Comentario, cap. 4 de "El cine o el hombre imaginario"

Detrás de cámaras. Los pájaros de Hitchcock.

 4. El alma del cine

Es interesante como cambia el papel del espectador ante los estímulos de la imagen del cinematógrafo, a los estímulos que le ofrece el cine. 

Con el cinematógrafo los estímulos eran novedosos y el espectador también era un actor participante. Éste se alteraba con imágenes que venían hacia el con movimiento decisivo y reaccionaba por instinto. Si venía un tren a toda velocidad en dirección suya, salían corriendo e incluso se llegaban a desmayar,

En el cine, ya se tenía una noción de que la imagen por más exaltada que fuera no generaba un daño a sí mismo. El cine involucró una participación de identificación con los personajes representados. 

Al oscurecer la sala, se enfrentaba a una historia o sueño propio; al generar diferentes planos de acercamiento la atmósfera cambiaba, generando suspensos o catársis; al corregir la fotografía y exagerar las luces y sombras ayudaba a sentir el misterio, la repulsión, el miedo; al escuchar efectos de sonidos que no sólo están para rellenar la escena sino que cumplen un propósito específico, se generaban estímulos que atrapaban al espectador; al estar detrás de la cámara y observar desde diferentes ángulos en movimiento se estaba siendo el principal testigo de lo proyectado

El cine incrementó las sensaciones ficticias de lo observado y creo un vínculo estrecho entre historia, actores, sonido y espectadores. 

Si bien el avance tecnológico no es motivo para imaginar más, si nos ayuda a vernos más inmersos en lo que presenciamos.